A la calle, que ya es hora
de que escribamos la historia
nadie ha podido ni puede
sepultar nuestra memoria.
Armados hasta los dientes de razones
borrado hasta en las paredes nuestro nombre
recuperamos pasado golpe a golpe
que nadie encarcela el aire entre barrotes.
Ya no hay ni yugos ni flechas contra el hombre
hemos ganado la paz sin condiciones.
Si todos saben qui�n somos
porque vinimos de lejos
puesto que nada perdemos
el futuro ser� nuestro.
Estamos perdiendo el miedo a tantas cosas
se aprende la libertad viendo su forma
cada batalla ganada desde ahora
va reduciendo a cenizas su memoria.
Cantamos contra una paz de cementerios,
cantamos contra quien quiera someternos.
Alzado sobre los muertos
todo el coraje del pueblo
reconstruyendo banderas
despleg�ndolas al viento.