Hablan con los cuerpos, las miradas, nada importa alrededor.
Viven en los m�rgenes del tiempo y son mucho m�s que dos.
Tienen quince a�os contra todos los que hicieron del amor
una obligaci�n.
Un papel firmado, unas promesas, un asunto sin valor.
Ellos que improvisan la ma�ana de aquel parque en un rinc�n.
Que se presintieron siete meses hasta verse en un caf�
por primera vez.
Pablo y Juana hicieron explosi�n,
fue de coraz�n a coraz�n.
Tejen su red de miradas
se estudian, se estrechan, se acoplan
inventan la vida y despu�s
Pablo y Juana hicieron explosi�n.
Toda la ciudad se reduc�a en unas hojas de papel,
ella le dejaba alg�n mensaje y recog�a los de �l,
hasta que una vez se descubrieron en la misma habitaci�n
escribi�ndose.
Fue como mirarse en un espejo y quedar prendido en �l.
Fue como expulsar todo el deseo por los poros de la piel.
Fue volar prendido a una cometa hasta una nube de algod�n
columpi�ndose.
