Palermo en octubre

Hay un sitio y un mes y una rosa
y un perfume especial y una pena:
es octubre igual que otros a�os,
pero ahora es octubre y apenas
se descubre lo que es estar solo
y mirar el color primavera.

De Plaza Italia al r�o,
Palermo se ha estrenado
su nuevo traje verde
para olvidar el fr�o.

Llegan al trotecito
los �ltimos mateos
al aire muerto a gritos
del codo de Dorrego.
Secreto de parejas
camino al Rosedal
y el lago que refleja
promesas al pasar:
domingo, primavara,
la mancha, el tobog�n,
la tarde buyanguera
y nada, nada m�s.

Mi soledad de octubre
no importa a los dem�s:
�Palermo en primavera
no es sitio de llorar!